Se atravieza con una ahuja a uno o a dos limones pequeños, y los unen con un cinta roja, se amarra la cinta con el (los) limón(es) al cuello de los perritos(as), si se seca el limón, hay que poner uno(s) nuevo(s). Hasta que el perrito(a) sane. Se deja los limones hasta que estén secos, pero muy pocas veces hay que renovarlos.
Yo lo he probado esta técnica y ha dado resultado, con mi mascota Moli cuando le dio gripe, al final no se si se sano por la fortaleza del can o funcionó el secreto de los limones, lo importante es que se sano.
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