Seguramente alguna vez habrás podido comprobar el grave problema de la falta de sangre en nuestros Hospitales. Tenías que operar a tu papá, quizás a tu mamá, o a tu hermano y te dijeron que iban a necesitar sangre y que el Hospital no podía dársela porque la que tiene está reservada para emergencias. Seguramente en aquella ocasión la operación de tu mamá, de tu papá o de tu hermano se pudo realizar porque varios miembros de la familia donaron la sangre que hacía falta. Y hoy siguen vivos gracias a aquella donación que recibieron.
Pero hay muchas ocasiones en que no hay tiempo de pedir sangre a los familiares: accidentes de tránsito, partos con hemorragias, operaciones de urgencia,….y otras ocasiones en que la cantidad de sangre que se necesita para que alguien siga viviendo es mucho mayor que la que pueden donar todos sus familiares: un niño con leucemia necesita dos transfusiones cada semana.
una vida. Y no donar sangre, cuando se puede dar, no es una falta de caridad, sino una injusticia, de la que se nos pedirá cuenta algún día. No tendrás que pagar nada, porque todo el material lo aporta el Hospital. Y recibirás gratuitamente un informe con la analítica de tu sangre. La mayoría de las personas entre 18 y 55 años pueden ser donantes. Con todo, si tienes alguna duda acércate a preguntar y los técnicos hospitalarios te la aclararán.
Desde la Pastoral Universitaria de la Diócesis de Huacho se ha promovido que el Hospital Regional realice una Campaña de Donación de sangre en el mismo Campus de laUniversidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión. No tendrás que pagar nada, porque todo el material lo aporta el Hospital. Y recibirás gratuitamente un informe con la analítica de tu sangre.
Tras tu donación recibirás varios regalos preparados por el Hospital Regional y la Pastoral Universitaria, pero el mayor regalo será la sonrisa de Cristo, “el primer donante de sangre”, al ver que tú, en verdad, quieres ser discípulo suyo y, siguiendo su ejemplo, das tu sangre a los demás.
Envía este mensaje a tus amigos, para que esta llamada de socorro que se te dirige desde la Pastoral Universitaria en nombre de quienes están o estarán en peligro de muerte llegue a muchos más. No des un rodeo mirando para otro lado. Entre todos hemos de conseguir salvar vidas.
Varios cientos de personas mueren cada año en nuestro Perú por falta de sangre. Por ello dar sangre es salvar
Por: José María Escudero, MCR.
Delegado de Pastoral Universitaria. Diócesis de Huacho.
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